Que 20 años no es nada...

Ya hace 20 años, la serie Sexo en Nueva York comenzo a cambiar el paradigma de las relaciones, “Bienvenidos a la era sin inocencia. Nadie desayuna en Tiffany´s, y nadie tiene affairs para recordar. En su lugar desayunamos a las 7.30 de la mañana y tratamos de olvidar nuestros affairs lo más rápido posible”. Se acabaron los cuentos de hadas.


Las aventuras de Carrie, Samantha, Miranda y Charlotte han marcado la forma de relacionarse de una generación de cambios. Al final todo desembocó es eso mismo, individualismo, muchas relaciones y de fácil olvido, el sexo por el sexo.

Claro que hoy es mucho más sencillo, tinder, whatsapp, twitter y un largo abanico de ofertas para contactar y tener cualquier tipo de relación al instante.

El orgasmo femenino, la masturbación, los abortos espontáneos e incluso el cáncer de Samantha son solo algunos de los tabúes que la serie consiguió hacer digeribles.

Por último, la gran contribución de la serie fue acabar con el mito de las solteronas y demostrar que no se necesitaba a un hombre para pasárselo bien si se tiene buenas amigas. Una amistad que cumple 20 años.